viernes, 14 de octubre de 2011

La felicidad

Buenas noches a todos. Es mi primera entrada en este blog y por lo tanto ando un poco perdido. Normalmente no suelo escribir a tan larga escala, sino que suelo dejar alguna que otra frase por las redes sociales, de mi propia invención o de algún filósofo o autor reconocido. Pero como se suele decir, mejor tarde que nunca.

A falta de ideas concretas para esta primera entrada, me centraré en uno de los temas que más me interesan: la felicidad. El fin último de la vida, aquello por lo que luchamos cada día.

Hay diversas formas de conseguir la felicidad, tantas como personas hay en este mundo. Algunos la obtienen a través de la dedicación al estudio, otros de las relaciones sociales, en fin muchas posibilidades.

Para mi la felicidad se halla en estar sereno, en poder disfrutar de la compañía de tus amigos, de pasar un buen rato con tu familia y de obtener el placer que puede otorgarte la vida. Desde pequeños placeres, cómo es el celebrar un gol de tu equipo, hasta grandes fuentes de placer, como observar un cielo estrellado o gozar de la compañía de "esa" persona.

Nuestra vida es un sendero por el que caminamos sin retorno, tiene un principio y un fin, además nos encontramos con numerosas bifurcaciones que nos llevarán a otros caminos, con diferentes vivencias cada uno.

Ahora solo nos toca saber como encaminarnos por éste, para conseguir la ansiada felicidad.

Aquí concluye mi primera entrada en éste blog, que espero no halla sido excesivamente monótono, ¡Hasta otra!

2 comentarios:

  1. Bueno...por lo que veo hablas mucho de la felicidad subjetiva, pero ¿Qué hay de la felicidad objetiva? Está bien que nos centremos en la serenidad, en celebrar un Gol...pero si no tenemos unos mínimos de estabilidad económica cómo nos vamos a poder estar serenos si tenemos miles de preocupaciones...
    Hay mucho autores que hablan de la felicidad, de la realización personal como grupal y estoy con ellos y contigo en que nuestro fin último es encontrar nuestro camino entre tanto sendero, pero en ocasiones hay que ser prácticos ¿No crees?

    ResponderEliminar
  2. Pues sí, estoy de acuerdo contigo en que deberíamos ser prácticos, y por supuesto sin un mínimo de estabilidad tanto económica como social, la felicidad se convierte en algo menos que en una utopía.

    ResponderEliminar