martes, 6 de diciembre de 2011

the wall

Nadie dijo que fuera justo
ni que fuera un camino de rosas

Está sumido en una noche eterna
en la que se esconde el amanecer

El reflejo de la luna trae nuevas ajenas
sonrisas de un universo paralelo
de agentes externos,
incomprensiblemente más agraciados

Ese muro llamado destino,
inconmensurable, rígido,
demostrará que no es irrompible
o morirá por este ideal

Ese es el camino que ha elegido
el único por el que merece la pena alzar la espada
con la rabia en sus ojos escrita

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